Descubre el significado del diezmo según la Biblia

El diezmo es un tema que ha causado mucha controversia en la iglesia cristiana y ha sido objeto de debate durante décadas. Según la Biblia, el diezmo es la décima parte de nuestros ingresos que debemos dar a la iglesia. Este mandamiento se ha conocido desde los tiempos del Antiguo Testamento y se menciona en varios pasajes bíblicos.

En el libro de Levítico 27:30, se dice: «Una décima parte de todo lo que la tierra produce, ya sea grano de los campos o fruto de los árboles, es del Señor; es una cosa sagrada para el Señor». Este versículo deja claro que el diezmo es una parte sagrada y separada para Dios.

El diezmo es una forma de honrar a Dios y reconocer su bondad y provisión en nuestras vidas. Al dar una décima parte de lo que ganamos, estamos demostrando nuestra gratitud y confianza en Dios para proveer para nuestras necesidades.

En Malaquías 3:10, se habla de los beneficios de dar el diezmo: «Traigan íntegro el diezmo para los fondos del templo, y así habrá suficiente alimento en mi casa. Pruébenme de esta manera – dice el Señor de los Ejércitos Celestiales – y vean si no abro las compuertas del cielo y vierto una bendición hasta que no quede más necesidad».

Este versículo muestra la promesa de Dios de bendecir y suplir nuestras necesidades cuando obedecemos Su mandamiento de dar el diezmo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la bendición no es el motivo por el cual debemos dar; más bien, es una consecuencia natural de nuestra obediencia y agradecimiento a Dios.

Además, el diezmo no es solo para la iglesia, sino que también se puede utilizar para ayudar a los necesitados. En Deuteronomio 26:12, se habla de traer el diezmo al lugar que el Señor ha elegido y ofrecerlo a los levitas, extranjeros, huérfanos y viudas, para que tengan alimento y estén satisfechos. El diezmo era un medio de ayudar a los pobres, necesitados y marginados de la sociedad, y demostrar la justicia y bondad de Dios para con Su pueblo.

Sin embargo, cabe mencionar que el diezmo no es un mandamiento para los cristianos en la misma forma que lo es para los judíos en el Antiguo Testamento. La Biblia no establece una cantidad específica de diezmo que debemos dar, ya que esto es una cuestión entre el creyente y Dios. En lugar de un mandamiento, se trata de un acto voluntario de adoración y gratitud hacia Dios por Su provisión.

Además, 2 Corintios 9:7 nos recuerda que debemos dar con alegría y no por obligación: «Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría».

Por lo tanto, es importante que cada persona decida en su corazón qué cantidad debe dar y lo haga con alegría y gratitud. No es una cuestión de legalismo o cumplimiento de un mandamiento, sino de adorar y honrar a Dios con nuestras finanzas.

En pocas palabras, el diezmo es una práctica bíblica que involucra dar la décima parte de nuestros ingresos como una forma de honrar a Dios, agradecerle y confiar en Su provisión. Esto puede incluir ayudar a los necesitados y marginados de la sociedad. Sin embargo, no es un mandamiento para los cristianos en la misma forma que lo es para los judíos en el Antiguo Testamento, sino un acto voluntario de adoración y gratitud.

Como dice el versículo de 2 Corintios, cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, con alegría y no por obligación. En última instancia, es importante recordar que nuestras finanzas son una forma más de servir y honrar a Dios, y debemos buscar siempre hacerlo con generosidad y gratitud.

¿Donde dice en la Biblia que el diezmo es obligatorio?

La discusión del diezmo es uno de los temas más polémicos en el mundo cristiano. Hay quienes argumentan que es obligatorio dar el 10% de las ganancias, mientras que otros afirman que esta práctica quedó en el Antiguo Testamento y ya no es necesaria. Pero, ¿qué dice la Biblia al respecto?

En los versículos finales (30-34) de Levítico 27 se dan preceptos sobre los diezmos. En ella se especifica que el diezmo es una ofrenda propia de la tierra y que es propiedad del Señor.

Asimismo, varios conceptos de diezmos se describen en Deuteronomio en el capítulo 14 versículo 22-29. En este pasaje se indica que el diezmo se debe entregar durante el período de tres años y que se debe consumir en presencia del Señor en el lugar que Él eligiera.

Entonces, ¿esto quiere decir que el diezmo es obligatorio? Por un lado, en el Antiguo Testamento se menciona que el diezmo es una ofrenda sagrada que se debe entregar a Dios. Por otro lado, en el Nuevo Testamento no se menciona explícitamente la obligatoriedad del diezmo, pero sí se habla de la importancia y la bendición de dar generosamente.

En 2 Corintios 9:7 se menciona que «cada uno siembre según haya determinado en su corazón, no con tristeza ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre». Aquí se enfatiza la actitud de dar, más que una cantidad o porcentaje específico.

Además, es importante tener en cuenta que el diezmo en la época del Antiguo Testamento tenía una función específica. El diezmo se utilizaba para sostener a la tribu de Leví, ya que ellos no recibían una porción de tierra para cultivar.

En el Nuevo Testamento, los líderes de la iglesia eran sostenidos por las ofrendas voluntarias de los creyentes. En lugar de exigir un diezmo rígido, en 1 Timoteo 5:17-18 se menciona que «los ancianos que gobiernan bien sean tenidos por dignos de doble honor, especialmente los que trabajan en predicar y enseñar. Pues la Escritura dice: ‘No pondrás bozal al buey que trilla’, y ‘El obrero es digno de su salario'».

Además, en Lucas 21:1-4 se relata la historia de la viuda pobre que da dos monedas de cobre como ofrenda en el templo. Jesús destaca que esta viuda ha dado más que todos los demás, ya que ha dado todo lo que tenía para vivir. Aquí se pone en relieve la actitud de confiar y depender de Dios en todas las áreas de la vida, incluyendo el aspecto financiero.

En base a esto, la discusión del diezmo en la actualidad no se trata de una cuestión de obligatoriedad, sino de una actitud de generosidad y dependencia en Dios en todas las áreas de la vida, incluyendo las finanzas.

Es importante tener en cuenta que cada persona debe orar y pedir la guía de Dios para determinar cuánto dar y a quien dar. Dios conoce las necesidades de cada uno y solo Él puede dirigir el corazón de cada persona en lo que debe hacer.

Finalmente, lo importante es que se dé libre y generosamente para apoyar la obra del Señor, ya sea en el ministerio, en la comunidad o en cualquier otra área donde se sienta la guía de Dios.

Por lo tanto, aunque el diezmo se menciona en la Biblia como una práctica sagrada, no hay evidencia en el Nuevo Testamento que obligue a los cristianos a dar una cantidad específica de sus ganancias. En lugar de eso, se resalta la importancia de dar de manera voluntaria, generosa y confiando en el Señor.

Esperamos que este artículo haya aclarado algunas dudas sobre el tema del diezmo, y que puedas tomar una decisión informada y guiada por Dios en cuanto a tus finanzas.

¿Qué dice Jesús de los diezmos?

En la religión cristiana, el diezmo ha sido y sigue siendo uno de los temas más debatidos y controvertidos entre los creyentes de diferentes denominaciones. En este sentido, ha habido opiniones divididas sobre si los cristianos deben seguir o no esta práctica que consiste en dar el 10 por ciento de sus ingresos a la iglesia. Sin embargo, hay un punto que es necesario aclarar: ¿qué dice Jesús de los diezmos?

Para responder a esta pregunta, lo primero que debemos hacer es acudir a las Escrituras. En el Evangelio de Mateo, capítulo 23, versículo 23, Jesús habla sobre el tema de los diezmos. En este pasaje, Él sostiene la obligación del diezmo: “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello”.

Aquí, Jesús no cuestiona la práctica de dar el diezmo, sino que la aprueba e incluso la considera necesaria. Sin embargo, lo que sí critica es la actitud de los fariseos, que estaban más preocupados por cumplir con una parte de la ley –el diezmo– que con los aspectos más importantes como la justicia, la misericordia y la fidelidad.

Por lo tanto, podemos decir que Jesús no cuestiona la práctica de los diezmos, pero sí la actitud de quienes los practican. De hecho, Jesús nos enseña que lo más importante es no olvidar los aspectos más relevantes de la ley –la justicia, la misericordia y la fidelidad– y dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.

Además, es importante mencionar que Jesús no solo habla sobre la práctica de los diezmos en Mateo 23:23, sino en otros pasajes del Evangelio. En Lucas 11:42, por ejemplo, Jesús reprueba a los fariseos por preocuparse únicamente por los diezmos y no por la justicia y el amor de Dios. Asimismo, en Lucas 18:12, Jesús habla de un fariseo que se jactaba de dar el diezmo de todo lo que poseía, pero que carecía de humildad y espíritu de servicio.

Es evidente que en estos pasajes Jesús no está diciendo que los diezmos sean malos, sino que lo más importante es la actitud y los valores que subyacen en esta práctica.

El diezmo es una práctica que tiene sus orígenes en el Antiguo Testamento y que se ha mantenido en muchas iglesias durante siglos. Es un acto de fe y generosidad, pero también puede ser objeto de malos entendidos y malos usos si no se practica con la debida actitud y discernimiento. Por eso, debemos preguntarnos: ¿practicamos el diezmo con la actitud correcta?

Por lo tanto, ¿qué dice Jesús de los diezmos? Jesús aprueba la práctica de los diezmos, pero no la actitud egoísta e hipócrita de quienes los practican. De hecho, Jesús nos enseña que lo más importante es no olvidar los aspectos más relevantes de la ley –la justicia, la misericordia y la fidelidad– y dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.

Citas bíblicas sobre los diezmos

Además de los pasajes mencionados en los párrafos anteriores, existen otras citas bíblicas que hablan sobre los diezmos. A continuación, presentamos algunas de ellas:

• Levítico 27:30 – “El diezmo de la tierra, tanto de la semilla de la tierra como del fruto de los árboles, es de Jehová; es cosa dedicada a Jehová”.
• Deuteronomio 14:22 – “Ciertamente darás los diezmos de todo el producto de tu sembrado que cada año rinde el campo”.
• Números 18:21-24 – “Y he aquí, yo he dado a los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del tabernáculo de reunión… los diezmos de los hijos de Israel que presentan a Jehová en ofrenda, he dado por heredad a los levitas; por lo cual les he dicho: En medio de los hijos de Israel no tendrán heredad”.
• Hebreos 7:4-10 – “Considerad, pues, cuán grande era este de quien aun el patriarca Abraham dio diezmos del botín. Es cierto que los hijos de Leví, que reciben el oficio sacerdotal, tienen mandamiento de tomar del pueblo los diezmos según la ley, es decir, de sus hermanos, aunque éstos también hayan salido de los lomos de Abraham. Pero aquel cuya genealogía no es contada de entre ellos, tomó de Abraham los diezmos, y bendijo al que tenía las promesas. Y sin discusión alguna, el menor es bendecido por el mayor. Y aquí, ciertamente, reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien se da testimonio de que vive. Y por decirlo así, por medio de Abraham, aun Leví, que recibía los diezmos, pagó diezmos, porque aún estaba en los lomos de su padre cuando Melquisedec le salió al encuentro”.

Estas citas bíblicas muestran la importancia que se le daba a los diezmos en la religión judía y cristiana desde tiempos antiguos. Sin embargo, como hemos mencionado anteriormente, es necesario tener una actitud correcta y responsable en su práctica, no solamente como una obligación o un gesto mecánico.

Esperamos que este artículo haya ayudado a aclarar algunas dudas sobre el tema de los diezmos y a entender mejor lo que Jesús dice al respecto. Si tienes alguna opinión o experiencia relacionada con este tema, no dudes en compartirla con nosotros.

Lo que dicen nuestros usuarios

Para mí, el diezmo según la biblia es una forma de mostrar gratitud y confianza en Dios. Personalmente, he experimentado bendiciones en mi vida al dar el diezmo y sé que Dios honra nuestra obediencia y fe al hacerlo. Es una parte importante de mi fe cristiana y es algo que me llena de alegría poder hacer.